La razón se compone de verdades que hay que decir y verdades que hay que callar.
Conde de Rivarol (1753-1801)
Y... ¡hola! ¡verlassen!
¿Habéis visto la nueva campaña de la DGT? Alrededor del sofá de mi casa, mi madre se quejaba de que era muy bruto para las personas que habían perdido a alguien en un accidente, mientras mi hermano sostenía que estaba bien para que la gente no cometiera imprudencias. El caso es... ¿este anuncio qué provocará? ¿Un terrible miedo a la carretera? ¿Indiferencia? ¿Precaución?. Está por ver. Con la huelga de bolis caídos de la Guardia Civil (¡¡viva!!), no sé yo si la gente no empezará a pisarle un poquito más, especialmente con la operación salida.
El otro anuncio, de la tele también, es sobre Toyota. Ahora que trabajo en una empresa y veo todo el proceso por el que se hace hasta lo más mínimo, me descubro emocionada ante la cadena de producción que Toyota ha hecho. Quizás se gane un huequecito en mi corazón, al lado de Wolfswagen... El anuncio ha salido, en realidad, de una idea creativa que se ha explotado a lo largo de todo el mundo: desde la declaración de especialista en calidad del montaje en Alemania, donde explotan la idea de: "Su Toyota es también mi Toyota". Vamos, el clásico sentimiento de la familiaridad. En la UK tienen el anuncio calcado, aunque un poquito más largo (en mi opinión, pierde ritmo). Y, como no lo encuentro en spanish y es prácticamente igual, os dejo la versión de sombrero y tacón:
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